Luego del tercer disco, Stratovarius decidió buscar otro vocalista, además de que Timo Tolkki se quede solo en la guitarra y es bajo estas circunstancias donde entra Timo Kotipelto, quien tiene la misma esencia que Tolkki, pero le da un aire nuevo a la banda que se refleja este disco.
«Fourth Dimension» es el nombre de este disco en donde la banda juega más para el lado progresivo aunque igual tiene bastante del power metal clásico que hizo que esta banda explotara. Timo Tolkki al dejar de ser cantante brilla aún más con su guitarra y el trabajo de Kotipelto en la voz es excelente.
«Winter» es la una de los mejores expresiones power metal del disco, una en donde la voz de Timo Kotipelto brilla y a pesar de que no es Tolkki, aún se mantiene la esencia de Stratovarius y la clave es el uso de los teclados.
En la canción «Stratovarius» se nota la mezcla entre power metal y metal progresivo, no en la duración pero en como suena y en como esta armada, suena como una canción de Stratovarius instrumental pero está estructurada como la de una banda de metal progresivo, es genial.
En «030366» es donde la banda se tira más fuerte para el lado del metal progresivo, es mi canción favorita del disco, una intro meramente progresiva que luego explota y entra la voz de Kotipelto a romper el trance y a pesar de que se siente la transición a power metal en ningún minuto se sale del todo, los sonidos de robots le dan todo un carácter épico a la canción.
«Twilight Symphony» es una analogía parecida a la canción «Stratovarius» pero esta vez es una ópera gigantesca, acá la banda suena como una gran orquesta y es donde Timo Tolkki más saca a relucir sus habilidades para componer este tipo de canciones.
Para una banda debe causar mucha incertidumbre estrenar un nuevo vocalista, el lado bueno en el caso de Stratovarius, es que, su ex cantante no se fue de la banda, simplemente asume otro rol y en este caso dio un resultado positivo, el álbum es sólido y el estreno de Timo Kotilpeto fue un éxito.
Por: Ignacio Bataller
