Ondi Timoner realizó un trabajo que expone a dos bandas amigas en la Costa Oeste de EEUU a finales de los 90’, The Brian Jonestown Massacre y The Dandy Warhols, los protagonistas de este documental. Tras largos periodos de gira, grabaciones, entrevistas, Timoner logró crear una obra que expone los altos y bajos de una de rock and roll.
La directora comenzó grabando la historia cámara en mano, como una cercana de las bandas. Llegó a filmar 1.500 horas, estas se condensaron una variedad de secuencias que hicieron más de una hora de documental.
El film, lanzado en el año 2004, atraviesa diversos momentos tensos, algunos de alegría, amor, encuentros y unidad. Sin embargo, omite hechos importantes y parte de la información sale de contexto, el documental sirve para tener un acercamiento mucho más íntimo al universo general de The Brian Jonestown Massacre, desde su visión, pero no completa. Por otro lado, sus compañeros músicos de Oregon, exponen cómo fueron crecieron musicalmente.
Ambas bandas comenzaron desde abajo, buscando oportunidades, tocando en bares, creando, compartiendo la pobreza, alegría y locuras. Por un lado se visualiza el mundo underground de Brian Jonestown, buscando fechas, haciendo disco tras disco, las peleas entre los siete miembros de la banda y el constante movimiento de ciudad y casas. Esto llega a la cercanía con The Dandy Warhols, como una especie de similitud, ya que ambas banda vivían cosas similares y compartían un par de shows o fiestas.
Claramente Brian Jonestown se muestra como una banda que quiere producir, sin llegar al éxito, pero The Dandy Warhols busca sonar en todos lados, con una discografía que se va formando detrás. Ambos grupos iban por direcciones opuestas, algunas veces con roces o burlas, pero compartían una amistad especial.
Anton Newcombe y Courtney Taylor-Taylor, ambos líderes de las bandas y creadores de las letras, se muestran en sus diversas facetas, desde las composiciones hasta su faceta de manager, tratando de hacer lo mejor para las bandas.
Este documental es una pieza criticada por las bandas, pero refleja el mundo que se vive a través de dos direcciones, una realidad muy cercana a aquellos años, capaz que hasta la actualidad, mostrando la parte de producción y la búsqueda del éxito como banda de rock. Es un entretenido documental, variado y de culto. No es necesario ser fanático para verlo, sin ser conocedor queda claro quiénes son estas bandas. Sin embargo, sirve para conocer la música y una parte que vivieron. Sin duda es un documental que debes ver y luego escuchar las bandas por separado. Saca tus propias conclusiones.
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Por Fernanda Schell.